La púa se sujeta entre los dedos índice y pulgar. Específicamente entre la yema del dedo pulgar y el costado de la yema de la falange del índice.
Para lograr la posición, tanto el índice como los otros dedos detrás de él, estarán articulados casi como cerrando el puño, aunque sin perder la relajación de la mano.
Es fundamental que los desplazamientos entre la primera y sexta cuerda se realixcen con soltura logrando la misma presición en ambos extremos. Los puntos de paoyo no deben ser rígidos ni ejercer mucha presión.
Para lograr la posición, tanto el índice como los otros dedos detrás de él, estarán articulados casi como cerrando el puño, aunque sin perder la relajación de la mano.
Es fundamental que los desplazamientos entre la primera y sexta cuerda se realixcen con soltura logrando la misma presición en ambos extremos. Los puntos de paoyo no deben ser rígidos ni ejercer mucha presión.
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